Se résoudre aux adieux
Aún no repuesto completamente de la emoción que me causó la anterior novela de Philippe Besson, la de un hombre accidental (apasionante, magistralmente escrita, historia de amor entre un asesino y el policía que tiene que investigarle y/o detenerlo; ¡sencillamente inolvidable!) decidí hace algunos días meterme en otra de sus últimas novelas.
Pero aquí la cosa está siendo muy distinta.
Donde allí había magia, emoción sincera y amor del que te remueve las entrañas, aquí hay aburrimiento, nostalgia mal entendida, masoquismo y hasta machismo.
Una chica que ha sido abandonada por su novio, se dedica a escribirle cartas (que nunca leerá, ni obviamente contestará) mientras viaja por el mundo - La Habana, Nueva York, Venecia,... - para alejarse de ese amor mezquino e intentar olvidarlo. Pero sin conseguirlo.
Hay momentos en los que el escritor describe como nadie lo que es el sentimiento de amar, uno de los actos más saludables que puede sentir el ser humano.
La nostalgia de los momentos felices siempre puede resultar agradable, pero el acto de regodearse con algo que ha acabado, y que no tiene vuelta de hoja, es hasta malsano.
Aún así, alguna que otra cosa sí que se puede aprender con su lectura.
Y, además, su título es taaan bueno (algo así como "Resumirse a los adioses") que hasta casi compensa el mal rato que a veces hace pasar su lectura.
Pero aquí la cosa está siendo muy distinta.
Donde allí había magia, emoción sincera y amor del que te remueve las entrañas, aquí hay aburrimiento, nostalgia mal entendida, masoquismo y hasta machismo.
Una chica que ha sido abandonada por su novio, se dedica a escribirle cartas (que nunca leerá, ni obviamente contestará) mientras viaja por el mundo - La Habana, Nueva York, Venecia,... - para alejarse de ese amor mezquino e intentar olvidarlo. Pero sin conseguirlo.
Hay momentos en los que el escritor describe como nadie lo que es el sentimiento de amar, uno de los actos más saludables que puede sentir el ser humano.
La nostalgia de los momentos felices siempre puede resultar agradable, pero el acto de regodearse con algo que ha acabado, y que no tiene vuelta de hoja, es hasta malsano.
Aún así, alguna que otra cosa sí que se puede aprender con su lectura.
Y, además, su título es taaan bueno (algo así como "Resumirse a los adioses") que hasta casi compensa el mal rato que a veces hace pasar su lectura.
5 comentarios
coxis -
Xabi -
Y mira el Cosimo, nuestro barrio parece Triball en versión literaria ;D
Cosimo -
inthesity -
inthesity -