Finalmente, la Montaña Mágica
He tardado bastante, y por momentos me ha costado mucho, pero acabo de terminar de leer "La montaña mágica". Y todavía sigo bajo el hechizo.
Su lectura me ha llevado más de un año (aunque debo confesar que entre medias me he leído otras tres o cuatro novelas más cortas), pero por fin he terminado esa gran obra monumental.
No es sólo monumental porque tenga 930 páginas, sino por la historia que cuenta, por su contenido y por la importancia de su mensaje. Por todo lo que dice, y cómo lo dice; y sobre todo por lo mucho que se aprende con su lectura, que es lo que de verdad importa.
Debo confesar que el impulso principal que me llevó a empezar este libro fue un comentario que leí hace tiempo del gran Rufus Wainwright en el que decía que todo el mundo debería leer "La montaña mágica" al menos una vez en la vida. Puede parecer banal y superficial, pero a mí fue ese simple comentario, viniendo de quién venía, el que hizo despertar mi curiosidad y aumentar mi interés por adentrarme en esa obra, que ya había sido considerada como uno de los cien libros más importantes de la historia. Y no os imagináis lo que me alegro de haberle hecho caso.
Ahora entiendo por qué. Una vez leída entera entiendo por qué esta novela es tan relevante.
No es un simple libro. No cuenta una mera historia, no. Es una filosofía, y una cierta manera muy concreta y definida de entender la vida y de ver el mundo.
Y es fascinante.
Sin duda alguna es uno de esos libros que, una vez que cierras sus tapas por última vez, te han cambiado para siempre. Yo ya no seré el mismo tras conocer la vida y la historia de Hans Castorp, porque su historia ha sido también la mía en este último año, y ya forma parte de mí.
Es una obra magistral que nos muestra las contradicciones sociales y espirituales de una época antigua, pero que son las mismas contradicciones sociales y espirituales a las que nos enfrentamos hoy día.
Un sanatorio para tuberculosos en medio de los Alpes puede ser el mejor sitio para la iniciación intelectual y erótica de un joven ingenuo en la Europa decadente a las puertas de la primera guerra mundial. Y en ese escenario los distintos personajes que van pasando por esta historia representan la condición humana con todos sus claroscuros.
Por momentos emocionante, por momentos agobiante, su lectura proporciona enormes momentos de placer, y eso es lo más importante...
"¡Adiós! ¡Adiós! ¡Vivirás o te quedarás en el camino! Tienes pocas perspectivas; esa danza terrible a la que te has visto arrastrado durará todavía unos cuantos años, y no queremos apostar muy alto por que logres escapar. Francamente, no nos importa demasiado dejar abierta esta pregunta. Las aventuras del cuerpo y del espíritu que te elevaron por encima de tu naturaleza simple permitieron que tu espíritu sobreviviese lo que no habrá de sobrevivir tu cuerpo. Hubo momentos en que la muerte y el desenfreno del cuerpo, entre presentimientos y reflexiones, hicieron brotar en ti un sueño de amor. ¿Será posible que de esta bacanal de la muerte, que también de esta abominable fiebre sin medida que incendia el cielo lluvioso del crepúsculo, surja alguna vez el amor?"
6 comentarios
lifeonmars -
Realmente tiene mucho estilo, y sentimiento, which is also important. ;-)
Cariños.
Mr. John Steed -
Cariños.
lifeonmars -
Entrégate, entrégate...
Tengo muchas ganas de verte. Casi seguro que me voy a pasar este domingo...
alarecherche, es una lectura que llevo años deseando. Y lo mismo le meto mano algún día de estos.
Había pensado leerla en su lengua original, pero no sé, eso tiene que ser muy fuerte.
Pero sí, la leeré algún día, y sé que no me arrepentiré.
Xabi, anda, ese estoy seguro que también te va a encantar y emocionar. Yo también tengo muchas ganas de leerlo... ;)
Besos para los tres.
Xabi -
Yo ahora voy a empezar uno que se llama "Decidme cómo es un arbol", de Marcos Ana. Ya te contaré... ;)
alarecherche -
Las más de 3.000 páginas de 'A la recherche du temps perdu'
Desde aquí te animo vivamente...
Un beso.
TB97 -