The night I met KM
Sucedió como suelen suceder las cosas grandes en esta vida: sin pretenderlo y de la manera más natural.
Fue el lunes por la noche, hace solo dos días (cada vez que lo pienso aún no puedo contener la risa), y todavía no he podido olvidarlo. Estábamos tomando un gintonic tranquilamente en una de las terrazas más divertidas y concurridas del casco antiguo de Ibiza, disfrutando del ambiente local, cuando, casi sin darme cuenta, de pronto veo justo delante mía ese rostro tan inmensamente popular y conocido - al menos tan inmensamente bien conocido por mí -, y al que llevo viendo y reviendo tanto en las revistas desde hace años.
Debo confesar que de pronto me dio un vuelco el corazón, y que el pulso se me aceleró un pelín. Aunque bueno, me contuve, supongo que me repuse, y tampoco hice ninguna locura. ;-))
Mientras nosotros dábamos buena cuenta de nuestra copa se sentó en la mesa de al lado, y tuve tiempo de contemplar, y hasta de reflexionar, sobre ese rostro y ese cuerpo que tanto han dado - y dan - que hablar, y sobre los que siguen corriendo ríos de tinta. Debo confesar que hubo muchos pensamientos que pasaron por mi cabeza en esos minutos, muchos recuerdos, sensaciones y casi toda una vida, porque, casi sin quererlo, esta chica forma ya parte de mi vida, como muchas otras cosas que han hecho y hacen que yo sea hoy en día lo que soy. Un pedacito más de mi historia.
Iba con su madre (para más inri llamada Linda (qué gran nombre, por cierto)), y allí les esperaban dos chicos británicos, arquetípicos de la fauna típica de aquel lugar, aquella zona y aquel momento. Y desde ese momento los cuatro ya no pararon de charlar, cuchichear, cotillear y reirse sin parar.
Llevaba un traje negro corto alucinante (mini, muy mini), con aberturas y transparencias por todos lados. Podría haber sido un Alexander McQueen, pero también un nuevo Lanvin, o incluso lo último de Balmain (de hecho me recordó mucho al traje que llevaba en la portada que colgué el otro día en mi entrada anterior). Y me encantó su fantástica melena corta rubia (ahora va de rubio claro). Me impresionaron sus impresionantes piernas, y su estupendo cutis. Pero sobre todo lo que más me fascinó fue su sonrisa.
Esa mítica sonrisa que le ilumina el rostro, con esos adorables dientes imperfectos y esos ojos achinados que la hacen irresistible.
Para mí, uno de sus principales secretos.
Me encantaron su actitud alegre y divertida, su elegancia al fumar y beber su gintonic con pajita, y ese tono relajado, pero distante y alerta, que tienen las estrellas de verdad cuando se encuentran en un espacio público y se sienten observadas.
Me gustó la naturalidad con que se movía en ese entorno, y la felicidad que transmitía. Yo personalmente me divertí y reí mucho cuando con un gesto de la mano le indicó a su madre que tenía algo entre los dientes y le pasó un flyer de La Troya para que se lo pasara entre los dientes (¡total!)
Estuvimos allí unos veinte o treinta minutos, y como os podéis imaginar disfruté mucho. Cuando nos marchamos todavía seguían allí, y obviamente no le dije nada (no me hubiera atrevido, la verdad).
Lo único que lamento es no haber llevado conmigo mi cámara de fotos, que normalmente suelo llevar siempre conmigo, pero que esa noche no tenía. Otro motivo más para convencerme de eso de que a partir de ahora ¡no sin mi cámara!
No se me ocurrirá nunca más dejarla en la habitación del hotel cuando esté de vacaciones. Me acompañará siempre.
Como siempre me acompañará aquel divertido recuerdo de una loca noche ibicenca de septiembre.
Ahora entiendo perfectamente por qué está donde está. Ahora sé con total certeza por qué esta chica es lo que es. Lo he podido constatar con mis propios ojos. Tiene una cara que realmente irradia una luz muy especial. Tiene una elegancia natural y ese je-ne-sais-quoi que muy poca gente poseen.
Puede que esté llena de imperfecciones (nunca me gustó la perfección absoluta). Quizá las habrá más guapas, más perfectas, más políticamente correctas, y más todo. Pero Kate Moss sólo hay una.
No por nada, y aunque a algunos les moleste, es uno de los iconos más representativos del siglo XX y del XXI.
(PD: por cierto, aunque parezca mentira, juro que la entrada que hice el otro día justo antes de salir de vacaciones con ella en la portada del Purple Fashion Magazine no estaba preparada. Ha sido una pura casualidad. Y es que ni yo mismo podía imaginar cuando elegí esa portada al azar que tres días después iba a estar tan cerca de la estrella. En fin, cosas que tiene la vida)
13 comentarios
lifeonmars -
Ha significado mucho en la moda, el arte (¿recuerdas el número especial que le dedicó W?) y la imaginería de los últimos quince años. Y lo que queda...
Beso
lifeonmars -
Espero que tu verano haya sido de cine.
Saludos y beso
lifeonmars -
Si al final son todas iguales.... Jajaja.
Uy, no te creas, existen unos Tena Men estupendos, que contienen el pisss que no veas...
Beso
lifeonmars -
lifeonmars -
Te juro que en aquel momento pensé en tí, y en enviarte un sms, pero para no tener no tenía ni móvil (o sea, ni cámara ni móvil). Me imagino que ya va siendo hora de cambiar esa manía mía de olvidarme todos los aparatejos cuando estoy de vacaciones.
Se que te hubiera encantado estar en aquel lugar, en aquel momento. Lo hubieras flipado también.
Tienes un mail!!
Beso
lifeonmars -
Aquel icónico The Face de 1990 con el editorial The Summer of Love de Corinne Day creo que fue uno de los que cambió mi vida.
En aquel momento empezó a abrirse todo un mundo nuevo frente a mis ojos.
Creo que visual y artísticamente es una de las mejores modelos que hayan existido.
Respecto a lo de las vacaciones quizá tengas razón. Trás tanto despendole ha llegado el momento de contención y recogimiento. Lo intentaré. ;-))
Beso
Señor Quinquillero -
¿Pero sabes lo mejor? Que nadie le puede quitar el puesto de una de las modelos más importantes de los últimos quince años. Nadie. Se lo ha hecho todo, todavía sigue y ha traspasado la frontera entre modelo e icono.
Un saludo.
MM -
Saludos!!
Inthesity -
De todas formas contén tus emociones que te vas a hacer pisssss.
Xim Ramonell -
Qué envidia encontrarse con esta señorita, con lo cerquita que está Ibiza de Mallorca, me hubieras avisado que igual lo hubiera remediado, jajaja!
Un beso,
p.d. No te olvides del mail que me prometiste ;)
calamarin -
Pero es cierto que poco a poco he tenido que rendirme a la evidencia... Si, es un rostro muy especial y sobre todo con mucho carisma... Y ahora señor Lifeonmars, ha llegado el momento de volver al trabajo, que este país esta muy en crisis y no se puede uno coger tantas vacaciones... Seguro que alguien le criticara duramente por ello (no seré yo ) Me alegro mucho de tu vuelta y de tus sorpresas vacacionales... Un beso.
lifeonmars -
No, a esa no la ví (de hecho en aquel preciso momento estaban pasando el video de un concierto de la australiana que se proyectaba en la pared de la terraza del bar (casualidades de la vida)), pero lo mismo también me la cruzo un día de estos. ;-)))
Besos.
Anónimo -