Vota a... Egipto
Llegó el día.
Después de votar con todas mis fuerzas, cojo la maleta y me marcho para Egipto. Ahí es nada.
Es la primera vez que viajo a ese país tan especial, pero lamentablemente es un viaje de negocios que no me dejará mucho (o ningún) tiempo libre para turistear y ver un poco. Aún así me llevaré mi cámara de fotos viajera, y el disfrute para la vista que me producirán sus populosas y ruidosas calles, las pirámides y el Nilo (porque llegaré hasta el Canal de Suez), aparte de disfrutar de mi exótico hotel, no me lo quita nadie.
Por culpa de este viaje, he tenido que vender la entrada al concierto de La Casa Azul, que ya tenía, porque no podré ir a su actuación de mañana lunes, y tampoco podré ver a mi admirado Marc Almond en su concierto íntimo, cabaretero y tan especial que dará con Baby Dee también mañana en Madrid - es lo que suele ocurrir, o nunca pasa nada o de pronto coinciden varias cosas -. De hecho casi me alegro, porque si hubiera estado aquí me hubiera encontrado ante una gran duda existencial sobre a qué concierto debería acudir. Pero bueno, supongo que no se puede tener todo, y este viaje compensa lo que dejaré atrás. Y además estoy convencido que mis amigos, que sí que disfrutarán de esos conciertos, me darán buena cuenta de ellos a mi vuelta.
De todas formas, aunque el viaje me apetece cantidad, me da rabia no poder disfrutar más de un destino tan apetitoso, porque tiempo, lo que se dice tiempo, no tendré mucho. Pero me lo tomaré como una primera toma de contacto con ese país al que sin duda volveré.
Estaré fuera unos días, y ya no pasaré por aquí hasta finales de la semana que viene, así que os dejo con uno de mis últimos descubrimientos, que espero os entretenga durante estos días.
Se trata de un bellezón exótico (Wendell Lissimore, se llama) al que posiblemente veremos pronto enseñando su estupendo cuerpo por las pasarelas internacionales y en las próximas campañas de moda planetarias. Pero a mí me interesa por su punto más terrenal, y es que, aparte de sus atributos naturales, ¿no encontráis irresistible ese punto blackexploitation setentero con un aire de gamberro de suburbio de cualquier ciudad árabe...? Mira por donde, pienso que me está isnpirando bastante para este viaje.;-)
2 comentarios
MM -
calamarin -